Llegaron del pueblo de Komang en 2014. Durante estos siete años han crecido juntos como hermanos y hermanas en la familia HKH. Han compartido muchos momentos inolvidables, siempre acompañados del cariño y la alegría de nuestra queridísima Nyima.
Pemba
Pemba llegó a nuestra familia HKH en el año 2015. Siempre fue muy buen estudiante y terminó sus estudios secundarios un año antes de lo esperado. A pesar de las dificultades familiares durante el último año de sus estudios, lo consiguió y está muy feliz!!
"Nyima, que es como nuestra mamá (a la que llamamos "Miss") nos quiere mucho. Cuando llegué a Katmandú nos enseñó de todo. Gracias a Rinpoche y a los generosos donantes, terminé mi grado 12 con un 100% de confianza para recibir cualquier desafío en mi futuro.
He vivido en el HKH durante siete años. Aprendí a relacionarme con los demás y a respetar a los mayores. Cuando perdí a mi mamá perdí la esperanza, pero más tarde me dí cuenta de que tengo hermanos y hermanas. Tengo que seguir viviendo por ellos/as. Nyima me animó a ser fuerte.
Muchas gracias a la generosidad de todxs los donantes, a lxs fundadorxs del HKH y a mi querida mamá. Echaré mucho de menos al HKH, especialmente a la que ha sido como mi madre, mi inspiración, a ti “Miss”.
Tendel
Tendel llegó a HKH junto con Pemba en 2015. Ella también terminó sus estudios secundarios un año antes de lo esperado.
“Cuando llegué al HKH estaba un poco asustada porque había oído que la vida en las residencias de estudiantes era difícil y estricta; pero al cabo de un tiempo pensé que la persona que dijo eso estaba totalmente equivocada. Sé que es difícil estar lejos de nuestra mamá y papá; pero con el paso del tiempo, me dí cuenta que el hogar donde vivía, el HKH, no es ni estricto ni una prisión.
Siento que el ambiente del HKH es el mismo que el de una familia donde el cabeza de familia (donantxs y "Miss") junto con los miembros de la familia (estudiantes del HKH) viven juntxs y comparten las alegrías y las penas.
Sé que algún día nos vamos a separar pero nadie va a borrar de nuestra memoria lo que hemos vivido y permanecerá con nosotrxs hasta la muerte.
Gracias a todas/os por formar parte de mi vida.
¡¡Quiero al HKH más de lo que puedo expresar con palabras!!”
Pema Khando
Pema Khando llegó al HKH en 2014. Quiere trabajar en gestión hotelera. Está muy ilusionada con sus posibilidades de futuro ahora que habla varios idiomas.
“Siento y veo todas las caras alegres, cada rincón de la casa, las voces, los alrededores y todas las cosas que hacemos en HKH. Esta palabra "HKH" es melodiosa y preciosa para mí, ya que hay muchas cosas y razones detrás de ella.
Por la gracia de Dios llegué aquí en noviembre de 2014. Han pasado todos estos años sin darme cuenta, día a día. He disfrutado de cada momento sin ningún problema o tensión. He crecido teniendo una vida feliz y próspera gracias a mi querida "Miss", a, Rinpoche y lxs donantes.
Cuando llegué aquí la primera vez yo era como el hierro (alocada, brusca, dura) y ahora me siento que soy como la plata. Lo que quiero decir es que he cambiado mucho. Estoy muy agradecida de haber crecido junto con una persona tan amorosa, cariñosa, solidaria y de buen corazón. Ella (Miss) siempre se ha preocupado por mí y me ha querido como una madre. Nyima siempre está a nuestro lado para afrontar juntxs todas las dificultades que surjan.
A veces se me llenaban los ojos de lágrimas al pensar en lo que ella está haciendo por nosotrxs. La familia HKH me ha dado todo lo que antes no tenía: una educación de calidad, amor, cuidado, comprensión, paz.
No encuentro palabras suficientes para agradecer todo lo que el HKH me ha dado. Hay tantas cosas que no puedo expresar con palabras".
Choezom
Choezom llegó a HKH en 2014. Era muy tímida pero toda la familia de HKH la recibió con mucho amor y cariño. Ahora se siente muy feliz y es mucho más abierta.
“Todavía recuerdo el día en que llegamos con nuestra Miss/mamá Nyima a Katmandú hace 7 años, era muy temprano por la mañana,. Todos nuestros hermanos y hermanas mayores nos dieron la bienvenida llenos de alegría en este hogar llamado HKH.
Gracias al enorme sacrificio, amor, compasión y apoyo inolvidable de Komang Rinpoche junto con los co-fundadores del HKH, así como a todxs los donantes del HKH. Por cada gota de vuestra amabilidad y ayuda, tenemos la oportunidad de tener una educacion en esta ciudad llamada Katmandú, viviendo con toda la familia HKH. Muchas gracias por vuestro apoyo inolvidable .
Gracias querida Miss por tu dedicación diaria para poder ofrecernos un brillante futuro. Todavía no me puedo creer que me voy del HKH. Pero al menos estoy feliz de que donde quiera que vaya estoy segura de que todxs nosotrxs recordaremos tus consejos.
Siempre recordaré tu dedicación, todo el sacrificio que has hecho por mí”.
Karma Khando
Karma Khando llegó al HKH en 2014 y toda su experiencia en el HKH la ha transformado como persona.
“Quiero expresar mi agradecimiento a todxs los miembros de mi familia HKH desde el fondo de mi corazón. Toda la familia HKH forma parte de la historia más brillante de mi vida porque ha hecho que mi vida sea completamente brillante y estable. La familia HKH me ha brindado mucho amor, cuidado y apoyo.
Ha sido un placer para mí crecer dentro de la familia HKH. Con cada sugerencia, consejo, aliento y apoyo de la familia HKH, he tenido la oportunidad de mejorar mi comportamiento y mi forma de pensar. Al principio de mi vida en el HKH, era una niña traviesa o tonta. Pero después, mi mamá/hermana/padre/maestra (Miss Nyima) me animó mucho y me dio muy buenas sugerencias, consejos y orientación. Así que poco a poco fui cambiando mi comportamiento y dejé las malas costumbres.
Gracias a Komang Rinpoche, a Miss Nyima y a todxs los donantes, tuvimos esta oportunidad de oro para estudiar y dar lo mejor de nosotrxs mismxs. He adquirido mucha experiencia y muchos conocimientos éticos con pensamientos positivos.
Gracias por transformar mi mente
Gracias por hacer que mi futuro sea brillante.
Gracias por cambiar mi vida y hacerme una persona más comprensiva.”
Tsering
Tsering llegó a HKH en 2014 con mucha timidez, pero muy agradecida por la oportunidad de realizar estudios secundarios.
“Muchas gracias a los fundadores de la Asociación Dolpo Komang Tulku (Rinpoche, Arantza y Anton), a la directora Miss/mamá, a todxs lxs amables donantes y a mis padrinos/madrinas por darme una oportunidad de oro. Me siento muy afortunada por ser una mujer con educación y por ayudarne a cambiar mi forma de pensar y sacarme de la oscuridad. Gracias por todo vuestro duro trabajo, amor, por vuestros sueños, por vuestra amabilidad y buenos deseos.
Cuando llegué a la familia HKH con mis amigxs tenía 13 años. En aquel momento era una chica un poco estúpida y con muchos pensamientos negativoCon el tiempo todo esto ha cambiado y me siento con una gran capacidad para hacer cualquier cosa en mi vida. También agradezco a mi papá y mamá por darme esta oportunidad para mi futuro.
En especial, muchas gracias a "Miss" que siempre nos apoya a todxs y nos guía en este maravilloso camino.
Todo este tiempo en HKH ha sido una de las mejores y más importantes partes de mi vida”.
Nyima,
Nyima Bhuti (tiene el mismo nombre que “Miss Nyima”) llegó al HKH en 2014 y su cara risueña y traviesa bendijo cada rincón del HKH.
“Querida familia de HKH, muchas gracias por ofrecerme un entorno saludable y de paz para poder crecer. He podido hacer todo lo que he querido, he jugado con todos mis queridxs amigxs y he aprendido mucho.
Me gustaría expresar mi más sincero agradecimiento a nuestro Rinpoche que inició este proyecto. Siempre nos ha escuchado como a un hijo y una hija. Muchas gracias por enseñarnos sobre Dharma y hacernos la vida más fácil.
Muchas gracias a lxs fundadores y a mis queridxs donantes por ayudarme a completar mi escuela secundaria. También gracias por preocuparos por nosotrxs, enviar regalos y cartas con mucho amor.
Querida Miss, te voy a extrañar mucho. La primera vez que llegué al HKH, no sabía ni cómo ponerme la ropa de la escuela. Pero mamá me enseñaste a ponerme el vestido y fue un día muy feliz y memorable para mi. Nos has nutrido con el amor y el cuidado de una mamá. Siempre luchando incansablemente por todxs nosotrxs, cuidándonos.
Estoy muy feliz y contenta de tener a una mamá/miss como tú en esta vida. Espero poder estar cerca de ti también en la próxima vida”.
Nosotros (Arantza y Anton) compartimos muchos momentos hermosos con estos maravillosos niños en nuestro viaje a Komang en 2014. Nos hace muy felices ver cómo han crecido y, especialmente, escuchar que se han sentido muy felices durante su estancia en el HKH.
Gracias a nuestra querida directora Nyima por ser madre, amiga, hermana y maestra y por marcar la diferencia; ella ha creado un espacio lleno de amor y armonía.
Gracias a todxs los donantes por hacer posible que consigan su sueño. Ahora pueden regresar a su pueblo con más experiencia y confianza en sí mismos/as.
